miércoles, 31 de octubre de 2012

[209]

 Ese momento en el que él tiene ganas de abandonarme, cuando duda de todos sus sentimientos y tira todo el amor que siento por la borda, es exactamente cuando mi vida pierde todo su valor. El que sólo él le atribuyó.
 Pone en riesgo absolutamente todo, mis sonrisas, mi sanidad y cordura, las mejores tardes de invierno, los besos más dulces, los domingos con menos depresión, los miércoles felices, cada 'Buen día' de las mañanas en las que se despierta a mi lado, entre miles de detalles que hacen que mi vida tenga color.
 Por más que escriba miles de poemas, miles de líneas en las que relate mi dolor e intente desahogarme de tantas lágrimas, nunca vas a entender lo que siente estar dentro mío, por suerte. Dudo soportar verte sufrir de esa manera.
 Daría absolutamente todo por lograr que entienda la falta que me hace cuando lo tengo lejos. No poder hablarle, olerlo, besarlo, me molesta. Todavía no sé bien por qué.
 Y esos recuerdos que se cruzan como un flash por mi cabeza son las millones noches que me dormí llorando por no ser digna de su amor, tirada en una esquina de la cama, rodeando mis piernas con los brazos cual bebé, recordando el calor de sus abrazos y la dulzura de las palabras que hoy me hacen tanta falta. Estaba enamorada de él, no solo de la forma en la que me hacía sentir cuando de a poco acercaba su boca a la mía o cuando me abrazaba al estar muerta de frío y su calor penetraba en toda mi pálida piel, también me enamoraba sufrirlo tanto. Me inspiraba miles de palabras tan hermosas como dolorosas.
 Todo lo que sentía en ese momento era nuevo y especial (Aún lo es). Era el único que me prestaba atención y me hacía sentir esa seguridad que anhelaba hace años y años, el primero con el que me había imaginado teniendo una familia y el mismo que hoy me dice que por momentos ya no me ama.
 ¿Cómo hago para no culparme a mí misma de no cuidarlo? O simplemente, de no hacerlo feliz. Por más que haya dado absolutamente todo por él, ya no es suficiente... Pero mis sentimientos siempre fueron los mismos, desde ese momento en el que me besó debajo de la lluvia (Y tristemente, él no lo recuerda) hasta el último beso que le vaya a dar en mi vida, sólo cambia el tiempo. Ese mismo que le esta robando la paciencia. Pero no puedo culparlo.
 Lloré noches enteras por tenerlo lejos mío, en todos los sentidos posibles. Pero aún así todavía tenía algo de esperanza que me fortalecía. Hoy lo sigo llorando, pero con la diferencia que sólo tengo miedo, miedo a perderlo.

jueves, 18 de octubre de 2012

[208]

 No se trata del tiempo, se trata de estar lejos. ¿De verdad disfrutas tanto estar solo?  ¡Se suponía que ibamos a hacer todo juntos y que el tiempo era compartido! Entonces, nunca fue así.

[207]

 No me extraño, no me extraña y NO ME VA A EXTRAÑAR NUNCA.

viernes, 12 de octubre de 2012

[203]


[202]

 Yo también leo y tengo buena ortografía. Siempre intento mejorarme, más por vos.
 Vivo escribiendo sobre lo que provocas en mí... Te tomé como musa inspiradora.
 Y nunca hablas sobre eso con los demás.

 Todavía no soy lo suficientemente buena, ¿verdad?

martes, 9 de octubre de 2012

[201] Free your mind, vomit your heart.

   Ese mismo que me hizo creer en el ''para siempre'', ahora me hace creer en el ''hasta que su paciencia quiera''. Sus palabras a veces duelen tanto, sofocan el aire de felicidad que me invade en su presencia, tanto que los golpes contra la pared no causan nada, más que una leve hinchazón de manos a la mañana siguiente... Pero sí varias noches de insomnio, silencios incómodos y lágrimas que mojan toda su ropa.
 Y ese desprecio que causa verme al espejo y decir 'No puedo hacerlo feliz' a pesar de haberle entregado toda mi vida, mis fuerzas y derrotas, mis momentos del plenitud, mis noches lujuriosas y esos días en los que la angustia no me dejaba moverme de la cama. Cuando le regalé mis defectos, ofreciéndole que haga lo que quiera con ellos y, aún más importante, cuando confié mi corazón y estabilidad emocional, en su amor y paciencia.
 Me curé sólo para poder vivir de una forma plena, con él... Por él. Porque sino, no tenía motivos para ser fuerte, no me molestaba seguir viviendo en un vacío, si sólo me perjudicaba (beneficiaba) a mí misma. ¿Para qué sonreír? Si nadie estaba a mi lado para devolverme la sonrisa. Era más fácil estar en ese estado de 'Muerto vivo'.
 Empecé a comer sólo para poder compartir una simple comida con vos, que a la vez te hacía tan bien verme así, viva... Para que no tengas que sufrir más cuando me desmayaba en un transporte público, para poder aceptar todo lo que venga de vos. Como siempre.
 A veces, puede parecer una obsesión... Pero no, Es mi manera de amar. Jamás sentí tanta felicidad estando al lado de alguien, y juro que no me beneficia en nada, porque no soy tan ciega como para ver que no podemos estar todo el día juntos, no porque no quiera, sino porque la rutina no lo permite. Pero me gusta sentir ese orgasmo de felicidad cuando me miras a los ojos o que la piel se me erice cuando me besas.
 Y puede matarme que los favores que me pidas se traten de verte menos tiempo, a diferencia de los que yo te pido a vos, que se tratan de pasar más días juntos... Pero con el tiempo voy a terminar de entenderlo, insisto, yo tampoco disfrutaría de mi monótona compañía.
 A pesar de todo, te debo mil perdones y millones de desayunos en la cama.
 Inevitablemente te amo cada día más.

jueves, 4 de octubre de 2012

[200]

 Prometerme no confesarle cuanto lo extraño y fallarme, me enferma.
 Pedirme a mí misma no hacerlo porque sé muy bien que en el 90% de los casos nunca recibo un 'Yo también', y que se me escape de la boca, me enferma.
 Si no te extraña, no te va a decir lo mismo porque VOS LO HACES.

 Aunque a veces esa mentira sí me gusta escucharla.

[199]


[198]

Voy a sacar de vos mi presencia, voy a brillar por mi ausencia